¿Qué son las tarjetas prepago? Ventajas e inconvenientes

Una tarjeta prepago es aquella que te permite llevar a cabo operaciones sin disponer de una cuenta bancaria asociada. El proveedor de esta tarjeta crea una especie de monedero virtual con una cuenta por internet.

Las tarjetas prepago tienen la categoría de dinero electrónico, según viene reflejado en el artículo 1.2. de la Ley 21/2011, sobre el Dinero Electrónico, que las define así:

“Todo valor monetario almacenado por medios electrónicos o magnéticos que represente un crédito sobre el emisor, que se emita al recibo de fondos con el propósito de efectuar operaciones de pago y que sea aceptado por una persona física o jurídica distinta del emisor de dinero electrónico”.

Características de las tarjetas prepago

Las tarjetas prepago tienen similitudes con las tarjetas de débito, porque el cliente solo puede emplear el saldo que posee en la tarjeta. La principal diferencia es que la tarjeta de débito va asociada a una cuenta en una entidad financiera. Como decíamos, en las tarjetas prepago solo se puede disponer del saldo que hayas cargado previamente. Por eso, son una buena opción para ser utilizadas con seguridad para pagos por internet ????o para determinadas actividades, como comprar gasolina ⛽ o para un viaje concreto ✈️.

Estas son sus principales características:

• Se recargan fácilmente
• Las tarjetas prepago facilitan el control del gasto
• Cuentan con el respaldo de Visa o Mastercard, por lo que se pueden usar en casi cualquier establecimiento de todo el mundo
• Permiten sacar dinero en cajeros automáticos
• Tienen una numeración única
• Poseen un código pin de seguridad

Cómo funcionan las tarjetas prepago

Las tarjetas prepago permiten comprar tanto a través de Internet como en los comercios tradicionales de manera igual que con otro tipo de tarjetas de crédito o débito.

La manera más fácil y común de recargarlas es mediante una transferencia, aunque en Plazo tienes otras opciones adicionales, como recargar con la tarjeta de otro banco o con Bizum.

Casi todas las tarjetas prepago cuentan con un área personal en internet donde se puede consultar el saldo disponible, el historial de operaciones o la configuración personal.

Tarjetas prepago virtuales

En los últimos tiempos han proliferado las tarjetas prepago virtuales. En este caso, hablamos de tarjetas que no disponen de soporte físico con el número de unidad, fecha de caducidad y un CVV (que es el código de verificación de la tarjeta).

Este tipo de tarjetas prepago virtuales están ideadas para las compras on line. De todos modos, casi todas ya permiten la opción de vincular la tarjeta prepago virtual a una plataforma de pago móvil, para así poder ser usada en tiendas físicas desde nuestro smartphone.

Ventajas ✅

La generalización del uso de las tarjetas prepago viene asociada a una serie de ventajas claras:

• Son perfectas para compras online: porque se pueden cargar solo con la cantidad deseada.
• Más control del gasto: al tener que recargarlas cuando se nos acaba el saldo nos hace más conscientes del desembolso de dinero que vamos efectuando.
• Más seguridad: suponen una barrera extra para sentirnos más seguros, ya que en caso de pérdida o robo solo perderíamos el saldo que tenemos depositado.
• Nuevos sistemas de autenticación: la mayoría tienen ya clave pin y validación del código de un solo uso recibido por sms.
• No están vinculadas a una cuenta corriente, por lo que nos evitan trámites con entidades financieras. Así que son muy cómodas.
• Suelen estar asociadas a descuentos y programas de puntos, en caso de ser emitidas por un establecimiento concreto, como un supermercado o un centro comercial.
• Son ideales para personas con pocos ingresos o ingresos irregulares, estudiantes, viajeros jóvenes o menores de edad.

Inconvenientes ⛔

Como casi todo en la vida, las tarjetas prepago también tienen su parte negativa:

• Algunas empresas pueden no aceptarlas: como compañías de alquiler de coches u hoteles, al no poder hacer cargos extra en caso de necesidad.
• No aptas para suscripciones: del mismo modo, algunos gimnasios o plataformas de streaming pueden optar por no permitir su uso debido a que su modalidad de suscripción es mediante el pago de cuotas mensuales.
• No permiten operaciones a crédito: puede ser un problema en caso de necesidad imperiosa de dinero, como en un viaje en el extranjero o ante un imprevisto.
• Los plazos de vigencia son más cortos en la tarjeta prepago y te tocará renovarla antes.

Con Plazo, todo son ventajas

Como has podido comprobar, las ventajas de tener una tarjeta prepago, como la que te ofrecemos en Plazo, superan con creces los inconvenientes. Ya sabes que usando tu tarjeta Plazo, te reembolsamos hasta un 40% de las compras que realices en una amplia variedad de marcas de primer nivel. No olvides seguir los pasos indicados para cada una de ellas. ¡Con Plazo ahorras, aunque gastes!